Cultivar
algodón es una parte esencial en la historia de la agricultura peruana. Las
distintas clases de algodón, oriundas de los Andes Peruanos, se encuentran
consideradas entre las más finas fibras en el mundo. Los agricultores peruanos
de algodón, localizados tanto en la costa del Pacífico como en los bosques
tropicales de la Cuenca del Amazonas han venido cultivado algodón por
generaciones; muchos de ellos han heredado una gran cantidad de técnicas
indígenas El algodón es un cultivo muy valorado porque solamente el 10% de su
peso se pierde en su procesamiento. Una vez que otros elementos como cera y
proteína pura.
Esta celulosa es ordenada de cierta manera que le da al algodón
propiedades únicas de durabilidad, resistencia y absorción. Cada fibra está
compuesta de 20 ó 30 capas de celulosa, enrolladas en una serie de resortes
naturales. Cuando la cápsula de algodón (cápsula de las semillas) se abre las
fibras se secan enredándose unas con otras, ideal para hacer hilo.y
tradicionales. La
generalización de su uso se debe sobre todo a la facilidad con que la fibra se
puede trenzar en hilos. La resistencia, la absorbencia y la facilidad con que
se lava y se tiñe también contribuyen a que el algodón se preste a la
elaboración de géneros textiles muy variados.
La fibra
textil es efímera, pues con el paso del tiempo se deshace y sus restos se
convierten en polvo. La ciencia actual cuenta, sin embargo, con medios para
desentrañar el pasado, con procedimientos que conllevan análisis microscópicos
o moleculares, cada vez más refinados; sin embargo, la historia de esta fibra
vegetal, probablemente la más importante en la historia de la humanidad, está
todavía por desentrañar.